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Seguimos con la serie sobre dobles, un juego de equipo pero también de estrategia. Aquí cada movimiento cuenta, cada golpe tiene un propósito, y la forma en la que tú y tu compañero leéis el partido puede marcar la diferencia entre ganar o perder. Esto es como construir una pequeña obra de arte: pura técnica y algo de talento. Todos los partidos requieren de múltiples decisiones, muy complejas, que se toman en muy poco tiempo. Por eso, no se trata sólo de tener buenos golpes, o de ser – técnicamente – mejor que tu rival, sino de cómo tú y tu compañero leéis el partido, anticipáis jugadas y ejecutáis un plan para descolocar a los jugadores que tenéis delante. Ser mejores, jugando a dobles, significa usar el trabajo táctico para construir puntos juntos, no por separado, y dominar la pista con movimientos coordinados.

En este artículo, te cuento cómo convertirte en un pequeño estratega de los dobles, desde tácticas fundamentales hasta ideas más avanzadas que podrás poner en práctica ya en tu próximo partido. ¿Te interesa? Empiezo sacando yo…

1. Controla la red: el territorio clave en dobles

La red es donde se ganan (o pierden) la mayoría de los puntos en dobles. Tenerla bajo control te da la ventaja de cerrar ángulos y presionar continuamente al rival. Sí, esto ya lo sabías, pero déjame que insista una vez más porque cuando consigas mandar delante, el partido será tuyo. Seguro.

¿Cómo dominar la red?

• Sube en el momento adecuado: El avance debe ser sincronizado. Tras un buen saque o una devolución profunda, tú y tu compañero debéis moverse juntos hacia la red. Este movimiento en equipo dificulta que el rival encuentre huecos.
• Presiona con movimiento: No te quedes estático en la red. Usa fintas para confundir al rival, ajusta tu posición según la dirección del golpe y mantén siempre la raqueta preparada.

Ten esto siempre presente:
En lugar de obsesionarte con bloquear la línea paralela, céntrate en cubrir los ángulos cruzados, que son los más utilizados en dobles. Buscar ‘El Pasillo’ suele ser un golpe más arriesgado, y muchos rivales fallarán al intentar aprovechar ese espacio.

2. Jugar al medio: desorganiza al rival con simplicidad

El centro de la pista puede parecer una opción obvia, lo sé, pero no te olvides que en el tenis, como en la vida, menos casi siempre es más. Los básicos son fundamentales, especialmente en este juego y jugar al medio es una táctica tremendamente efectiva para generar caos. ¿Quieres saber por qué?

• Menos errores: Golpear al centro minimiza los fallos y ofrece un mayor margen de seguridad.
• Confusión: Obliga a los rivales a decidir rápidamente quién juega el golpe, lo que puede generar malentendidos, especialmente si no se comunican bien.

Consejo práctico:
Aprovecha el centro en peloteos largos o puntos importantes. Un golpe profundo al medio, especialmente con topspin, puede forzar una devolución floja y abrir oportunidades para atacar desde la red.

3. Saques y restos: el inicio lo es todo

En dobles, el saque y el resto tienen un impacto aún mayor que en individuales. Un buen saque puede crear oportunidades para tu compañero en la red, mientras que una devolución efectiva puede desbaratar las tácticas del rival. A mí me gusta atacar cada punto desde el principio, si me conoces ya lo sabes, y lo cierto es que llevar la iniciativa te abre un abanico de opciones muy grande cuando se trata de construir el punto para acabarlo delante.

Claves para el saque:

• Busca colocación, no solo potencia: Dirige el saque a zonas donde el rival esté incómodo, como el revés o al cuerpo.
• Coordina cada decisión con tu compañero: Si el jugador en la red planea cruzar, el saque debe ser cerrado o al cuerpo para limitar las opciones del devolvedor. Recuerda la importancia de los signos o de la comunicación.

Claves para el resto:

• Golpea profundo y cruzado: Esto empuja al sacador hacia atrás y minimiza el riesgo de una volea del jugador en la red, además le da opciones a tu compañero en la red para moverse, presionar en la bolea, provocar un error o entrar a rematar desde la volea.
• Ataca los segundos saques: Si el rival deja un saque flojo, aprovecha para tomar la iniciativa desde la devolución. Aprieta sin ahogarte, recuerda que se trata de construir el punto, no de arriesgar más de la cuenta.

4. Identifica patrones y explota las debilidades del rival

El análisis en tiempo real es una de las herramientas más poderosas en dobles. Dedica tiempo en el peloteo para analizar a tus contrincantes, comparte tus descubrimientos con tu compañero y construid los pilares de vuestra estrategia. Luego la iréis puliendo durante los primeros juegos, en los cuales acabaréis de identificar las fortalezas y debilidades de la pareja rival. Permanecer atentos y leer cómo juegan es vital para llevar la iniciativa.

¿Qué observar?

• Golpes débiles: Si un jugador tiene un revés poco confiable, por ejemplo, ataca ese lado con constancia.
• Movilidad limitada: Si un rival es lento para retroceder, los globos pueden ser una herramienta ofensiva clave. O al revés, si no le gusta ir hacia delante, tráelo a la red, porque en este caso probablemente va a ser más un estorbo para su compañero que si se queda en el fondo de la pista.

Clave avanzada:
Fíjate también en la dinámica del equipo contrario. Si notas falta de comunicación o dudas entre ellos, dirige tus golpes al centro para amplificar sus errores.

5. Innovación en dobles: tácticas para ir un paso más allá

Si quieres pasar al siguiente nivel, estas estrategias avanzadas te permitirán sorprender y desbordar a tus rivales:

Formación en «I»: Confusión Deliberada

¿Has jugado alguna vez en ‘I’? En esta formación, ambos jugadores se alinean en el centro de la pista, con el compañero del sacador agachado cerca de la red. Es algo más agresiva (tácticamente hablando) que la Australiana, y genera mucha tensión en el restador porque provoca dudas sobre cuál será la cobertura que hará cada jugador y a qué espacio debe apuntar.

Aplicación:

• Ideal para sorprender en puntos clave y desestabilizar patrones de juego del rival.
• Requiere práctica para coordinar movimientos y evitar dejar espacios descubiertos.
• Puede utilizarse más a menudo que la Australiana, porque no resulta fácil intuir hacia dónde se van a mover los jugadores de la red y fondo.

Poaching Agresivo: Dominio en la Red

El «poaching» es una táctica agresiva en la que el jugador de la red, compañero del que está al servicio, se anticipa y se mueve para interceptar el resto del rival, añadiendo presión y forzando errores. Se puede usar en diferentes tácticas, una de las más habituales es en la Australiana de la que ya te hablé en el segundo artículo de esta serie, o en la propia formación en ‘I’.

Aplicación:

• Coordina señales con tu compañero para indicar cuándo realizar el poaching.
• Varía la frecuencia para mantener la incertidumbre en el oponente.

Saque y Volea en Dobles: Presión Constante

Implementar el saque y volea de manera efectiva en dobles puede desestabilizar a los rivales, especialmente si se combina con variaciones en la colocación del saque. Tiene riesgo, evidentemente, especialmente si el saque no es bueno o el jugador que sube no es suficientemente rápido o si no se sabe sacar bien de encima voleas a media pista, pero su capacidad para generar confusión convierte esta táctica en un elemento de presión muy interesante,

¿Qué debes tener en cuenta?

• Saca hacia el cuerpo o ángulos abiertos para generar devoluciones débiles.
• Avanza rápidamente a la red para cortar los ángulos de respuesta.

Variación de Ritmo y Efectos: Desestabilizar al Rival

Alternar la velocidad y el efecto de los golpes, como combinar golpes planos con topspin o slices, puede romper el ritmo del oponente y generar oportunidades de ataque. Esto es especialmente útil en partidos en los que los duelos desde el fondo de pista no generan oportunidades en la red y acaban convirtiéndose en duelos. Recuerda, los dobles son un juego de equipo.

Aplicación:

• Utiliza golpes con topspin para profundizar y desplazar al rival, seguido de slices bajos para atraerlo a la red en condiciones desfavorables.
• Incorpora globos ocasionales para cambiar la dinámica del punto y crear incertidumbre.

Ataque al Jugador Más Débil: Enfoque Selectivo

Identificar y dirigir el juego hacia el oponente con habilidades inferiores puede aumentar las probabilidades de éxito, explotando consistentemente sus debilidades. Y sí, sé lo que estás pensando, pero no nos engañemos: quieres ganar. Por eso estás leyendo este artículo. Jugar a tu rival más débil no sólo le genera tensión a él o a ella, también puede desactivar a su compañero e incluso generar tensiones entre ellos. El juego mental es muy importante.

Aplicación:

• Observa durante los primeros juegos para identificar al jugador más vulnerable.
• Dirige saques, devoluciones y golpes de presión hacia ese jugador para generar errores y oportunidades de quiebre.

Conclusión: Estrategia, creatividad y equipo

El éxito en dobles no depende solo de la técnica individual, sino de cómo tú y tu compañero pensáis, os movéis y trabajáis como un bloque. Controlar la red, jugar al medio, anticipar los movimientos del rival e incorporar tácticas avanzadas como el pase falso o la triangulación son las claves para elevar vuestro juego y dominar la pista.

Ahora es tu turno: ¿Qué estrategias utilizarás en tu próximo partido? ¡Cuéntamelo en los comentarios y sigamos aprendiendo juntos!